jueves, 4 de septiembre de 2014

Tu agenda escolar...¡¡imprescindible!!

Ahora que estamos inmersos en la compra de materiales necesarios para el comienzo del curso, quisiera hacer hincapié en la necesidad de incluir una agenda escolar en nuestra lista de la compra.
Es un instrumento casi imprescindible a partir de 3ºESO, pero deberíamos acostumbrar a nuestros hijos a utilizar esta herramienta desde el inicio de la ESO, ya que incorporarán antes su uso a sus rutinas diarias.

¿Por qué es necesaria una agenda escolar?


La agenda es una herramienta clave en la organización de las tareas diarias, no sólo académicas, sino también personales. Las ventajas que implica su uso habitual son:

  • Apuntar las tareas implica la creación de una responsabilidad en su cumplimiento.
  • Ahorra tiempo, al no tener que preguntar a otros compañeros qué tareas había para hoy o cuándo era el examen.
  • Nos aseguramos de llevar la tarea al día. Basta con consultar qué tareas hay para mañana para comprobar si las tenemos hechas.
  • Nos permite programar la tarea de casa, priorizando aquellas tareas que vencen antes, o secuenciando tareas grandes.

¿Cómo utilizar la agenda escolar?

Lo primero es asumir que la agenda debe ser un instrumento de uso diario, que siempre debe estar en tu mochila, y encima de tu mesa cuando haces los deberes. Además, para maximizar el rendimiento de su uso, aquí te dejo algunos consejos:
  • Apunta las tareas que te dice el profesor, en la hoja de tu agenda correspondiente al día que tienes que entregarlas.
  • Apunta de la misma forma las fechas de los exámenes y trabajos más grandes, en este caso con colores llamativos. También es aconsejable que marques estas fechas más a largo plazo con un marcapáginas adhesivo o un post-it.
  • Cuando te dispongas a hacer tus deberes, echa un vistazo a las páginas de tu agenda: la del día siguiente, la de pasado mañana, etc., y planea qué tareas harás esta tarde en función de su fecha de entrega.
  • Para los exámenes y trabajos que requieren más tiempo para su preparación, planea tú mismo qué cosas harás cada día. Aquellos días más descargados de tarea diaria, dedica más tiempo al estudio del examen o la realización del trabajo, planteándote objetivos semanales de los mismos. Por ejemplo: hacer un esquema de la lección, buscar información para un trabajo, etc.
  • Tacha o marca las tareas que ya has realizado. Esto también ayuda a tu mente a descargar la responsabilidad del cumplimiento de tareas, y a ver el progreso de tu trabajo. Te sentirás "más descargado".
  • Apunta las calificaciones de tus exámenes y trabajos una vez realizados, así podrás llevar el control de tu evolución.
  • Apunta también las dudas que te surjan al estudiar o al hacer tus ejercicios, para planteárselas sin falta a tu profesor al día siguiente.
Espero que os haya animado a haceros con una agenda escolar, que unida a vuestro tablón o corcho hará que tengáis todo controlado.

Un saludo,
Esther.


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